miércoles, 2 de junio de 2010

El Efecto Avestruz

Cuantas veces hemos hecho uso de ese "efecto"... Cuando todo va mal y no queremos ver la realidad, cuando no sabemos como afrontar algún problema deseamos cerrar los ojos y que todo altercado se esfume... La avestruz mete la cabeza dentro de un agujero porque cree que dejando de ver a su enemigo podrá deshacerse de él, pero si lo pensamos esto no es más que una tontería pues mientras esconde la cabeza en un hueco, el resto del cuerpo queda al descubierto sin saber por donde le vendrán los "golpes", por eso desde hace ya algún tiempo intento afrontar la realidad tal y como venga, unos dicen que soy luchadora, otros dicen que tengo un afán suicida, yo en cambio, me considero madura, unas veces ganaré y otras en cambio no me quedará más remedio que fortalecerme con la experiencia, pero creeme, sacar la cabeza del agujero y enfrentar la realidad es la única manera de volver a caminar con la tranquilidad de un pavo.

Otra de las causas de usar esta "táctica" tan conocida es la vergüenza, esa amiga que nos acompaña y hace que nos sonrojemos en los momentos menos oportunos, o la que hace que apartemos la mirada y escondamos nuestra cabeza en cierto modo como la avestruz.Digamos que podría ser una autodefensa pero... más bien sería una autodestrucción ¿o me equivoco? Si esconde la abeza nunca tendrá la oportunidad de salir ganadora, al contrario, siempre dará por hecho que ha sido vencida. No hay escondite tan grande como para esconder la vergüenza, aunque este sentimiento venga del miedo a ser avergonzados.

Y si hemos aprendido esto de este animalito, entonces... ¿porque no observamos también el pose que tiene cuando camina con su cuello erguido y la cabeza bien alta? El problema es que ella utiliza su instinto para esconderse o caminar orgullosa pero nosotros, los humanos no tenemos mas remedio que cada mañana sacar nuestra cabeza de aquel agujero y afrontar la realidad del día a día. ¿que nos tocará hoy? =D

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